Con este post queremos darle importancia a la educación musical, ya que es un aspecto que influye de manera positiva en el desarrollo integral de los niños y niñas.
En primer lugar, es necesario conocer las características psicológicas específicas de los niños y sus posibilidades de aprendizaje, para que el adulto sepa cómo trabajar la música de manera adecuada.
La psicología musical es todo aquello que abarca el gusto musical, el comportamiento y la actitud de los individuos ante la música, la audición... Ante esto, podemos decir que la música influye directamente ante las facultades humanas, como pueden ser: en el desarrollo mental y emocional, en el desarrollo de la sensibilidad, en la voluntad, en la inteligencia y en la imaginación y, también, potencia la expresividad, la creatividad y la memoria de los más pequeños. Por lo que la música nos ayuda desde edades tempranas a proporcionar un equilibrio para alcanzar un nivel adecuado de bienestar y felicidad.
Cabe destacar que en educación infantil la actividad musical por excelencia es el juego, por lo que es necesario que el profesorado sea creativo y tenga espontaneidad en la realización de todas las actividades musicales como en las de movimiento o en las entonación de canciones, debido a que es un factor intelectual y biológico muy importante para el desarrollo mental, físico y emocional de los niños y las niñas.
Todo esto aporta una gran variedad de beneficios en los menores y, por el contrario, es interesante que conozcamos el término de musicoterapia, el cual hace alusión a la utilización de la música como proceso terapéutico, con el objetivo de facilitar y promover la comunicación, la relajación, el aprendizaje, la motricidad, la expresión... Además de ser utilizado como recurso para reforzar la autoestima y la personalidad, logrando una integración social.
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